La Sirenita tuvo problemas para recaudar en China
El tanque de Disney La Sirenita no logró ser un éxito en el mayor mercado de Hollywood fuera de los Estados Unidos. Ataques de la prensa china por la "etnicidad" del elenco y reflejos de las tensiones económicas entre los dos países.
Mientras que en los Estados Unidos y casi en todos los mercados occidentales la nueva versión del clásico de Disney La Sirenita tuvo excelentes performances en la taquilla (en la Argentina debutó en segundo lugar; en los EE.UU. lleva un acumulado de 95 millones de dólares desde el viernes de estreno), en el mercado externo más importante para Hollywood las cosas son más bien decepcionantes. En China, la película apenas recaudó 2,5 millones de dólares, mientras que la taquilla está dominada por Rápidos y Furiosos X, que hasta el momento lleva en ese territorio un acumulado de 110 millones de dólares.
El problema alrededor de La Sirenita es complejo porque tiene menos que ver con cuestiones de marketing o poder de marca y mucho más con algunas cuestiones políticas y culturales más complejas. En primer lugar, Disney tiene muchos problemas en China desde 2020, cuando el estreno de un filme realizado casi específicamente para ese mercado (Mulan) se vio pospuesto y complicado por el estallido de la crisis del Covid. Luego hubo problemas con Eternals, el tanque de la franquicia Marvel, por presentar un beso homosexual y, sobre todo, por haber sido dirigido por la sino amerciana Chloé Zhao, ganadora del Oscar por Nomadland y crítica del gobierno chino, donde es decididamente mala palabra. Las escenas con alguna alusión a la homosexualidad fueron también lo que se cuestionó en otros tanques (por ejemplo, Dr. Strange en el Multiverso de la locura), pero es probable que el problema sea otro.
Disney maneja parques de atracciones en dos territorios conflictivos para el gobierno de Beijing: Hong Kong y Shanghai. La crisis de la pandemia dañó bastante las relaciones diplomáticas con los Estados Unidos, y esa tensión hizo que el mercado cinematográfico y el de entretenimientos en general se volcaron a un mayor nacionalismo, con la intención de mantener al público local. En estos momentos, hay cierta distensión con Hollywood, pero lo que motivó el problema con La Sirenita fue un discurso en los medios de "inclusión forzada" y tratar de "imponer la agenda de corrección política" estadounidense al público chino.
La polémica ahuyentó público de las salas lo que demuestra el manejo que hicieron los medios al respecto (aunque en los Estados Unidos se los acusó de "racistas"). Detrás de la guerra de discursos, hay una evidente tensión por el dominio del sistema de exhibición en salas. En China hay una recuperación importante, pero aún está un 22% detrás de las recaudaciones de 2019, un poco en coincidencia con el resto del mundo.