Cine argentino en el Festival de Uruguay: Arturo a los 30, una comedia de errores
Martín Shanly dirigió “Juana a los 12”, película que tuvo su premiere en la Competencia Nacional del BAFICI (2014) y ahora presenta "Arturo a los 30" que tuvo su paso por la Berlinale y desembarcó en Uruguay en la sección de competencia internacional
Especial para BAE Negocios
Arturo a los 30 es una hermosa y personal comedia cuyo título internacional es About 30 que escribió, dirigió y protagonizó Martín Shanly, que había deslumbrado hace años con Juana a los 12.
"Hay algo de la edad que en un punto les pesa a ambos personajes, creo que ambos sienten, o les hacen sentir que no están a la altura de su edad. En cuanto a una saga, no sé, me gustaría dar por finalizada esta etapa ombliguista y hablar de cosas más alejadas a mí en el futuro", señala Shanly en una entrevista con BAE Negocios.
—El tema de la edad nos lleva al paso del tiempo. Y, en ese sentido, Arturo a los 30 juega formalmente con ello. ¿Cómo concebiste o pensaste este "diario cuidadosamente desordenado"?
—La estructura de la película fue cambiando con el tiempo. En las primeras versiones del guión eran simplemente capítulos y el último capítulo era el casamiento. Me pareció linda la idea de que haya un presente y volver atrás en momentos en los que Arturo estuviese en algún tipo de peligro , ya sea literal o mental. Cuando el presente se vuelve insoportable se regresa a un momento aparentemente arbitrario del pasado.
—Esos flashbacks operan como elipsis y contribuyen al suspenso. Arturo a los 30 parece más cercana a los géneros clásicos (especialmente la comedia) que Juana a los 12. ¿Lo ves así? ¿Qué cambios sentís que experimentaste en cuanto a cómo haces una película de una a la otra?
—Sí, hubo un intento consciente de hacer una comedia y abrazar al género. Y sí, también tratar la atención de un posible espectador con cuidado y a veces usar “truquitos baratos” para retenerla, como estos cliffhangers (o como se llamen) que mencionás, y otras cosas así. Creo que en Juana no tenía esa preocupación.
—¡Cuanto más barato es el truquito, más difícil es usarlo con elegancia... !(risas). Pero se nota laburo desde lo formal, desde el guión y con los actores para trabajar con los géneros. ¿Cómo fue ese trabajo, esa construcción? ¡Cada uno de los personajes merece una película propia!
—No hubo instancia de casting, cada personaje fue escrito para actores que los interpretaron. A mí también me sorprendió. Primero que se copen. Y segundo lo inmediato que fue el entendimiento del código, que supieran lo que estábamos haciendo. Feliz vería una película con cualquiera de esos actores.
—Felicidad es lo que genera acercarse a Arturo a los 30 (más allá de sus instancias agridulces). ¿Cómo te pegó que haya sido seleccionada en la prestigiosa sección Forum de la Berlinale?
—Fue una sorpresa, y el final de un camino muy largo en donde muchas personas trabajaron mucho. En algún punto pensé que nunca iba a salir a la luz. Estoy muy contento de que sea en la Berlinale.
Arturo asiste a la boda de su ex mejor amigo. En el viaje en coche entre la iglesia y el clubhouse británico donde se celebra la fiesta, se ve envuelto en un extraño accidente del que consigue salir ileso. A partir de ese momento, una serie de recuerdos comienzan a aparecer en forma de flashbacks que involucran eventos recientes significativos pero mundanos. Al intoxicarse con alcohol y marihuana, el pasado y el presente se fusionan de una manera incómoda, obligándolo a enfrentar duelos pendientes así como los aspectos más oscuros de su personalidad
Arturo a los 30, tráiler oficial