Eliminan normas centenarias para simplificar procesos en la industria láctea
Las normas datan de 1926 y 1927 y quedaron desactualizadas por los adelantos tecnológicos desarrollados desde entonces
La Secretaría de Industria y Comercio derogó dos resoluciones centenarias que establecían reglamentaciones de medición en la industria láctea, que quedaron desactualizadas por el paso del tiempo.
La medida se plasmó en la resolución 209/2024, publicada hoy en el Boletín Oficial, que deja sin efecto a las resoluciones 357 del 7 de junio de 1926 y 407 del 15 de junio de 1927, ambas del ex Ministerio de Agricultura, dictadas durante la Presidencia de Marcelo T. de Alvear.
La primera de las normas derogadas se aplicaba para los metrógrafos lineales, un término en desuso que se aplicó en el siglo XX para determinados procesos de medición, en tanto la otra medida consistía el reglamento técnico y metrológico aplicable para butirómetros, pipetas para leche y balanzas empleadas en el análisis de la grasa de la leche y en la crema.
Ninguna de las dos resoluciones tenía una aplicación práctica en la actualidad y su derogación se inscribe en la serie de medidas impulsadas por el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, cuyo titular, Federico Sturzenegger, instó a “desmalezar” las regulaciones que cayeron en desuso.
En los considerandos de la resolución se explica desde la aplicación de la ley del Sistema Métrico Decimal Argentino (Simela) en mayo de 1962 no se presentaron “variedad de prototipos para la aprobación de modelo, verificación primitiva y/o Declaraciones de Conformidad ni declaraciones juradas de importación”.
Desburocratización y simplificación
“Existen factores que estarían influyendo en el incentivo de la certificación de esta clase de instrumentos, uno de estos factores podría atribuirse a la evolución tecnológica de los instrumentos de medición y a la automatización de los procesos productivos en los cuales podrían formar parte alguno de estos prototipos de instrumentos, lo que ha generado como resultado la sustitución parcial y/o total de estos”, señaló.
Por consiguiente, la norma consideró “indispensable alinear las políticas aplicables al mercado interno, procediendo a una verdadera desburocratización y simplificación de los procesos productivos en relación con el usuario, así como a la eliminación de todas las trabas y obstáculos al comercio”.
