La crisis financiera local e internacional, con desaceleración económica, inflación y suba de tasas, no parece haber afectado a los inversores que apuestan a buenos proyectos en la Argentina. Al menos esto es lo que muestran los datos de un reciente estudio sobre “Crecimiento, distribución y principales industrias involucradas en el ecosistema emprendedor argentino en 2022”.

El informe, presentado por la Asociación Argentina de Capital Emprendedor (ARCAP) y la firma Microsoft, señala que durante el primer semestre del año se realizaron 42 transacciones de Capital Emprendedor y Semilla, por unos u$d 163.8 millones.

Las inversiones en “Capital Semilla” son  operaciones que generalmente no superan el millón de dólares y permiten a una startup salir al mercado para validar la respuesta de los clientes y expandirse a nivel nacional. En 2022 se registraron 18 transacciones en este segmento.

En tanto, las inversiones de Capital Emprendedor son aquellas de más de u$d 1 millón, destinadas a regionalizar o internacionalizar una compañía. Generalmente, estas inversiones provienen de fondos mixtos o internacionales. En lo que va de este año, se registraron 24 operaciones de este tipo.

Si bien el número de transacciones totales fue ligeramente menor al del año pasado (hubo 45 operaciones de inversión registradas en el primer semestre de 2021), “el monto invertido por ronda casi se duplicó, sobre todo en las de fase más temprana, pasando de u$d 1.7 millones por proyecto a casi u$d 3 millones”, detalla Lorena Suárez, presidenta de ARCAP. 

Suarez también destacó el crecimiento de la cantidad de inversores locales apostando a compañías nacionales, que se vió reflejado en el aumento del número de socios de ARCAP.

“Donde sí estamos viendo el impacto de la crisis internacional, la guerra y la suba de tasas de referencia, es en aquellos proyectos más avanzados, que requieren inversiones más importantes de capital emprendedor, con fondos que generalmente provienen de afuera y ahora se muestran más cautos”, señaló. No obstante, remarcó que “este relevamiento, con datos semestrales y anualizados, se realiza desde 2016 y desde entonces, el ecosistema emprendedor e inversor no ha dejado de crecer en el país”.

 

Sectores y perfiles para invertir

Los sectores que recibieron mayores inversiones son, en el caso de capital semilla: Biotecnología (29,4%)

• E-Commerce (11,8%)
• Fintech (11,8%)
• Servicios de Software para empresas - Saas (11,8%)
• tecnologías para Salud (11,8%)
• Tecnologías para el agro (5,9%)

En cuanto al capital emprendedor, los sectores más atractivos fueron casi los mismos:

Biotecnología (13%); Fintech (13%); tecnologías para el agro  (13%); para la educación - Edtech (8,7%); E-Commerce (8,7%); software para empresas (13%) y otros (30,4%).

A nivel geográfico, el 67,5% de las inversiones se concentraron en startups de la ciudad y el Gran Buenos Aires; el 22,5% en Córdoba, el 5% en Mendoza y Santa Fe y el 5% en Tucumán. Este dato “sirve como punto de partida para impulsar una federalización del financiamiento hacia empresas de otras provincias”, destaca el informe en sus conclusiones .

Sobre el total de las empresas, un 80% ofrecen productos o servicios B2B (Business to business) y el 20% B2C (Business to consumers)

En cuanto a los indicadores de género, el 5.1% de las startups que recibieron financiamiento el primer semestre de 2022 tienen una CEO mujer (5.1% vs 6.1% en el segundo semestre de 2021). Y al observar la conformación de equipos, en el 12,4% de los equipos fundadores hubo al menos 1 mujer en su composición (12,4% vs 26% en el segundo semestre de 2021).

Un dato llamativo del estudio es que el 25% de las empresas que recibieron inversiones buscan un impacto social y ambiental, además del rédito económico. En general, estos emprendimientos están alineados con uno o más de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.