Si el carnicero de la esquina aceptó Bitcoin, ¿por qué no también dólares? En una medida que ya genera opiniones cruzadas, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció que desde el 28 de febrero los pagos con tarjeta de débito podrán realizarse en dólares. Aunque esta disposición es obligatoria para bancos y procesadoras de pago, queda en manos de los comercios decidir si adoptan la modalidad.

En el corto plazo, el foco estará puesto en sectores como turismo, electrodomésticos y materiales de construcción. “Estamos listos para implementar este sistema gradualmente a partir de febrero”, afirmaron desde Fiserv, una de las empresas que ya está trabajando en la adaptación de los puntos de venta. Las cadenas comerciales que operan con productos dolarizados o insumos importados, como las automotrices y el retail, también figuran entre las primeras en subirse al esquema.

El mecanismo parece simple: el cliente elige si paga en pesos o dólares al momento de la compra. Sin embargo, detrás de esta propuesta subyacen complejidades operativas. Comercios que opten por cobrar en dólares deberán abrir cuentas en esta moneda, algo que los bancos ya prometieron agilizar. Desde Prisma Medios de Pago destacaron: “Trabajamos junto al BCRA para cumplir los tiempos estipulados”.

Más que una anécdota: hacia la bimonetización

El sistema no busca competir con el dólar informal. Se trata de una herramienta destinada a quienes poseen ahorros en dólares bancarizados y quieren gastarlos sin pasar por el laberíntico mercado de cambios oficial. “Esto facilita el consumo de bienes durables y servicios dolarizados, como turismo y construcción”, explicó Ariel Setton, economista especialista en medios de pago.

No obstante, los impuestos son una piedra en el zapato. Si bien los tributos provinciales, como Ingresos Brutos, y nacionales se calcularán en pesos, algunos detalles técnicos aún esperan ser definidos. Las empresas adquirentes aseguran estar afinando los últimos ajustes para garantizar una transición sin contratiempos.

 

¿Asado en dólares? Sí, pero no espere milagros

A pesar de la viralización de ciertos gestos políticos —como el diputado Ramiro Marra pagando un asado en dólares—, la realidad comercial es menos glamorosa. La adopción será lenta y sectorizada. Comercios pequeños o de rubros no dolarizados, como almacenes y kioscos, probablemente mantengan sus precios en pesos.

Desde el Gobierno aseguran que la medida incentivará el consumo, pero analistas como Nicolás Urtubey remarcan que el impacto será marginal. “Esto no genera más dólares en el sistema, simplemente los mueve”, explicó el especialista.