El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, insinuó que el gobierno de Donald Trump consideraría otorgar una línea de crédito específica a la Argentina en caso de una crisis internacional que amenace la recuperación económica impulsada por el presidente Javier Milei. Así lo señalaron tres personas con conocimiento directo de sus declaraciones, formuladas en un evento cerrado de JPMorgan Chase & Co. en Washington.

La herramienta elegida sería el Exchange Stabilization Fund (ESF), un fondo con antecedentes en rescates financieros a países como México en 1995 y Uruguay en 2002. "El gobierno estadounidense estaría dispuesto a utilizar el Fondo de Estabilización Cambiaria para apoyar a Argentina si ocurriera algo ajeno a su responsabilidad, siempre y cuando Milei mantenga el rumbo de sus políticas económicas", afirmó Bessent durante la reunión, según las fuentes citadas por la agencia Bloomberg.

Ya había expectativa por un crédito especial de Estados Unidos, cuando, hace una semana, el mismo funcionario visitó la Argentina y mantuvo una reunión con Milei. Sin embargo, aquel mismo día descartó la posibilidad. 

Ahora, las palabras del funcionario estadounidense repercutieron de inmediato en los mercados financieros. Los bonos soberanos argentinos escalaron posiciones durante la jornada del martes y se ubicaron entre los de mejor desempeño en los mercados emergentes. En particular, los títulos con vencimiento en 2035 subieron un centavo y cotizaron en torno a los 66 centavos por dólar.

Carolina Gialdi, directora de ventas internacionales de Max Capital en Buenos Aires, atribuyó el repunte a las expectativas generadas por los dichos de Bessent: "Los bonos subieron porque hay una creciente expectativa de que EEUU respaldará a Milei en caso de una crisis". Añadió que una ayuda de ese tipo "reduciría los riesgos políticos de que el peronismo regrese al poder, actualmente latentes en el precio de los bonos".

El ESF fue creado en la década del treinta y ha sido utilizado en más de cien ocasiones por el Tesoro norteamericano para asistir a gobiernos y bancos centrales extranjeros con el objetivo de estabilizar sus monedas, según información oficial del Departamento del Tesoro.

Estas declaraciones representan un matiz respecto a lo dicho por el propio Bessent durante su visita a Buenos Aires, el 14 de abril, cuando se reunió con Milei en la Casa Rosada en una visita relámpago. En aquella ocasión, al ser consultado por un posible préstamo, respondió con contundencia: “Eso no está bajo consideración”.

La visita se dio en una jornada clave para el oficialismo, marcada por el levantamiento del cepo cambiario. Según fuentes al tanto de los encuentros, Bessent "habría avanzado" con el ministro de Economía, Luis Caputo, en conversaciones preliminares sobre una posible asistencia. No obstante, desde la Casa Rosada minimizaron las versiones y hablaron de "rumores".

Días antes del evento en Washington, Bessent había elogiado públicamente el programa económico argentino. “Al final, también contamos con el Fondo de Estabilización Cambiaria. No nos hemos comprometido a formar parte de él, pero podríamos hacerlo”, dijo en declaraciones a Bloomberg News.

La administración Trump ya había jugado un rol decisivo a principios de abril para que la Argentina accediera a un nuevo programa de financiamiento con el Fondo Monetario Internacional por USD 20.000 millones. La posibilidad de que ese respaldo se extienda a través del ESF, aunque todavía no confirmada oficialmente, marcó un punto de inflexión para la percepción de riesgo argentino en los mercados.