El Gobierno de Javier Milei avanza con medidas para reactivar el crédito hipotecario en Argentina. La Comisión Nacional de Valores (CNV) publicó una resolución para agilizar la securitización de hipotecas bancarias, es decir, permitir que los bancos puedan agrupar los préstamos y venderlos en la Bolsa de Valores, lo que les daría mayor liquidez para seguir otorgando financiamiento.

Actualmente, hay más de 20 bancos que ofrecen este tipo de préstamos para acceder a la casa propia.

¿Qué cambios se hicieron para fomentar el crédito hipotecario UVA?
 

A través de la resolución 1053, la CNV estableció un régimen especial para la oferta pública de fideicomisos financieros hipotecarios. Esta normativa alcanza a vehículos de inversión que incluyan como activo subyacente créditos hipotecarios, hipotecas y otros instrumentos similares.

El propósito de esta medida es incentivar a los bancos a ofrecer más créditos UVA, ya que al vender sus carteras de préstamos en el mercado de capitales, pueden obtener fondos frescos y reducir el riesgo financiero.

 

¿Cómo funciona?
 

El proceso de securitización de hipotecas permite que los bancos agrupen sus préstamos UVA y los transfieran a un fideicomiso financiero, que luego coloca estos activos en la Bolsa. De este modo, las entidades financieras pueden deshacerse del riesgo a largo plazo, obtener liquidez y seguir otorgando nuevos créditos.

Actualmente, el plazo promedio de los depósitos bancarios en Argentina es de solo 30 días, mientras que los créditos hipotecarios UVA tienen un horizonte de 20 a 30 años. Esta diferencia genera dificultades para que los bancos puedan fondear préstamos de largo plazo sin comprometer su liquidez.

Con esta nueva regulación, los bancos podrán hacer coincidir mejor sus pasivos (depósitos) con sus activos (créditos), además de atraer inversores interesados en instrumentos de bajo riesgo y alta rentabilidad.

 

¿Cómo impacta la medida en los créditos hipotecarios?
 

Ante la posibilidad de colocar estos fideicomisos en la Bolsa, los bancos comenzaron a subir las tasas de interés de los créditos UVA, ubicándolas en un rango de 7% a 9% por encima de la actualización por inflación. Esto busca hacer más atractivos estos instrumentos para los inversores del mercado de capitales.

En el pasado, la securitización de hipotecas fue utilizada en Argentina durante la gestión de Mauricio Macri y, previamente, en la década del 90 con la Convertibilidad. En aquel entonces, las AFJP eran las principales compradoras de estos fideicomisos. Actualmente, los jugadores interesados podrían ser las compañías de seguros y fondos comunes de inversión, que buscan instrumentos de largo plazo con baja morosidad y tasas reales positivas.

Con esta medida, el Gobierno busca reactivar el mercado de créditos hipotecarios, que en 2024 ya mostró un crecimiento significativo, impulsado por la demanda de financiamiento para vivienda y la expectativa de mayor estabilidad en la economía.