La carga impositiva es la preocupación principal de los empresarios, tanto por el peso que representa en los costos totales como por las características distorsivas de varios de los tributos que la componen, de acuerdo con un relevamiento realizado por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA).

La solución del problema “es urgente, no es un tema que se puede seguir dilatando", manifestó el presidente de la entidad, Santiago Mignone, en la presentación de una nueva edición de la Encuesta de Expectativas de Ejecutivos, de la que se desprende que, a pesar de esa preocupación, el 82% de los 257 empresarios consultados prevé una mejora en la situación económica, aunque de manera moderada y con diferentes percepciones entre las compañías industriales y las de servicios.

Junto al economista de Invecq, Santiago Bulat, y la directora ejecutiva del Instituto, Luciana Paoletti, Mignone dijo que no iba a opinar de la relación conflictiva entre el Gobierno y la oposición, reflejada en las últimas votaciones en las dos cámaras legislativas, aunque reconoció que no lo ponía “feliz” lo ocurrido en el Congreso.

 

“El Parlamento está para discutir temas de mediano y largo plazo, tomar su responsabilidad en serio y no hacer esta comedia”, expresó, en una nueva manifestación empresaria contraria a la postura de los bloques opositores, luego de que el presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Natalio Mario Grinman, asegurara que la causaba “asquito”.

 

Los resultados de la encuesta

 

Como es habitual, IDEA consulta a los empresarios sobre su evaluación de los últimos doce meses y sus perspectivas para los doce próximos respecto a diferentes aspectos, como la situación económica, el comportamiento de las principales variables y la situación de cada empresa en lo referente a la inversión, rentabilidad y Utilización de Capacidad Instalada (UCI).

El 58% de los ejecutivos proyectó que la situación económica será “moderadamente mejor” y un 24% “mucho mejor”, con un total de 82% de respuestas positivas contra un 83% en lo que respecto a la evaluación del último año, en el que además hubo una menor percepción de crecimiento moderado (48%) pero mayor en cuanto a quienes creyeron que la situación fue “mucho mejor” (35%).

 

“Se observa que la preocupación de los empresarios ha cedido frente a la carga impositiva y el todavía exceso de regulaciones”, destacó el titular de IDEA, al referirse a la identificación de los obstáculos principales que las empresas ven para su crecimiento.

En ese sentido, la carga impositiva sobresalió al representar la preocupación principal en el 75% de los casos, seguida por el exceso de regulaciones con el 35% y la disponibilidad de talentos con el 25%.

 

Por primera vez en muchos años, la inflación dejó de estar entre las preocupaciones principales y quedó relegada al cuarto lugar, con el 18%, ubicándose inmediatamente después dos temas señalados recurrentemente en los últimos meses, como la infraestructura de servicios públicos (14%) y la apertura de importaciones (11%).

Empleo, inflación y rentabilidad

 

“No estamos viendo ninguna expectativa de contracción del empleo”, confió Mignone, al señalar que el tema solo preocupa al 5% de los encuestados y figura en el doudécimo puesto.

Otro aspecto a destacar es la expectativa de una menor rentabilidad, algo que para el presidente de IDEA es algo “lógico” al despejarse a la inflación como uno de los temores principales, si se tiene en cuenta que en tiempos de altos índices de precios se recurre al “colchón” de precios.

“En un contexto de (alta) inflación, el más importante en la compañía es el CFO (gerente financiero), pero con la inflación en baja, cobra sentido lo que se pueda ganar en competitividad en otros flancos, como la carga impositiva”, señaló al respecto.

 

Al respecto, consideró que “cuando la inflación baja, es razonable que los márgenes comiencen a bajar”, a diferencia de las épocas de inflación alta, que “tapa todas las ineficiencias”.

 

La preocupación principal

Mignone remarcó la carga impositiva como la preocupación principal de los empresarios, sin distinción entre la las jurisdicciones nacional, provincial o municipal, además de advertir que dentro de ese concepto también se abarca el aspecto laboral.

Además de los altos niveles de las alícuotas impositivas, puso el acento en la necesidad de eliminar los gravámenes distorsivos, entre los que identificó a Ingresos Brutos -al que calificó como “pésimo”- retenciones y el impuesto al Cheque.

De todos modos, advirtió que en IDEA “no estamos para poner soluciones, eso es tema del Gobierno”, aunque sugirió que “tienen que haber un acuerdo entre Nación y provincias” para encarar una solución de manera coordinada.

 

“No somos quienes para darle al Gobierno una legislación, pero sí para decirle que en estas condiciones no somos competitivos”, remarcó, para enfatizar que la necesidad de encontrar una solución al problema de la carga tributaria “es urgente, no es un tema que se puede seguir dilatando”.

En ese sentido, valoró el objetivo del Gobierno de “avanzar en eso” y adelantó que “después de las elecciones vamos a seguir pidiendo soluciones”.