BANCOS

Nuevo monto máximo de extracción de efectivo en cajeros automáticos

El límite anterior de $15.000 se había establecido en 2020, en plena pandemia, y desde entonces no había sido modificado

BAE Negocios

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) implementó un cambio significativo en los límites de extracción de dinero en los cajeros automáticos del país. Esta medida se aplicará sin importar en qué banco tiene cuenta el cliente ni a qué red de cajeros pertenece.

La resolución del BCRA establece que todos los bancos deben garantizar la posibilidad de retirar hasta el triple del dinero que permitían anteriormente en una única extracción, desde cualquier cajero automático en el país. Este cambio aplica tanto para clientes de los bancos como para aquellos que no son clientes, sin importar el tipo de cuenta que posean.

Es importante destacar que este nuevo monto será aplicable a todos los clientes, independientemente de la entidad financiera o la red de cajeros automáticos utilizada. Esto significa que se podrá retirar el mismo monto desde cualquier cajero, sin distinción.

 

Gratuidad de las extracciones

Para los empleados en relación de dependencia, jubilados, pensionados y beneficiarios de planes sociales que cobran a través de la ANSES, las extracciones seguirán siendo gratuitas, sin importar en qué banco se realice la operación. Esto asegura que estas personas podrán acceder a su dinero sin costos adicionales, una medida que busca facilitar el acceso al efectivo en un contexto económico desafiante.

No clientes: ¿cuánto dinero pueden retirar por el cajero?

A partir de ahora, el monto diario que las entidades financieras deben ofrecer a sus clientes para retirar efectivo fue elevado de $15.000 a $60.000.

Contexto y razones del cambio

El ajuste responde a la necesidad de actualizar un monto que había quedado desfasado frente a la inflación y el aumento en el costo de vida. El límite anterior de $15.000 se había establecido en 2020, en plena pandemia, y desde entonces no había sido modificado. Aunque algunos bancos ya habían aumentado el límite a $40.000, muchos continuaban con el tope original, lo que generaba inconvenientes para los usuarios.

Además, la baja denominación de los billetes en circulación (principalmente de $1.000 y $2.000) había hecho que el monto de extracción diaria fuera insuficiente para cubrir las necesidades básicas de muchos usuarios. Con la reciente aparición del billete de $10.000, esta medida también busca hacer más eficiente la operación de los cajeros automáticos.

 

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