Trump vs Harris: cómo pueden afectar las elecciones de EEUU a Argentina
Tras el primer debate entre ambos candidatos, aún resta saber cuál será el próximo presidente de los Estados Unidos. Expertos analizaron cómo podrían impactar sus políticas en Argentina
El exmandatario Donald Trump, y la vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata, Kamala Harris, se enfrentaron este martes en lo que fue su primer debate cara a cara. A poco menos de dos meses para las elecciones, el debate podría tener impacto en el electorado norteamericano, que mantiene altos niveles de paridad en su intención de voto. De ser el caso, las consecuencias en Argentina no serían menores, teniendo en cuenta el alineamiento explícito del Gobierno con Trump y la expectativa de un desembolso de dólares frescos por parte del FMI si el candidato republicano regresa a la Casa Blanca.
En PPI consideraron que el debate entre Donald Trump y Kamala Harris en Filadelfia dejó a esta última como favorita en los mercados de apuestas. “En PredictIt, la probabilidad de que Harris gane se amplió: antes del debate era de 53% frente a 52% para Trump, y ahora es de 57% contra 47%. Trump se puso a la defensiva, lo que no lo benefició”, argumentaron.
Remarcaron que el enfrentamiento inicial se centró en la economía y la inmigración. “Trump atacó la política fronteriza de Harris, mientras ella destacó que su agenda estaba enfocada en ‘elevar a la clase media y a los trabajadores de Estados Unidos’”. Más allá de esto, aclararon que “quién ganará las elecciones sigue siendo una incógnita. Harris lidera en las encuestas de voto popular, pero Trump podría obtener más votos electorales y ganar a través del Colegio Electoral”.
En lo referido al impacto que podría tener en Argentina el resultado de las elecciones, el analista de Fundación FIEL Rosendo Fraga explicó que para el presidente Javier Milei, “en el corto plazo Trump es una suerte de apuesta a todo o nada. Su eventual triunfo daría al presidente argentino una perspectiva de crecimiento político-global muy importante, en un contexto en el cual dominan en América Latina los presidentes progresistas y tienen un lugar central las dictaduras de izquierda”.
Y agregó: “Sin que exista perspectiva de un apoyo financiero masivo como el que Trump dio a Mauricio Macri a través del Fondo Monetario Internacional, la relación Trump-Milei lo ayudaría a ganar confianza en mercados e inversiones. Si ganara la candidata demócrata, la situación sería a la inversa. El diálogo con Washington se enfriaría y las dificultades económicas serían mayores, en momentos en que la Argentina pugna por reencauzar su economía y avanzar con las reformas”.
Elecciones EEUU: cómo impactarían en ArgentinaPor su parte, el equipo de Wise Capital realizó un balance sobre cómo podrían incidir sobre la economía local las principales propuestas económicas de ambos candidatos. Para el caso de Trump, destacaron que las bajas de impuestos prometidas podrían traer una “tasa libre de riesgo al alza, que impacta en los mercados locales”, sumado a “un mayor costo de la deuda”. En este sentido, consideraron que “la renta variable podría verse favorecida en este contexto”.
Respecto a la vuelta del proteccionismo, Wise consideró que “China podría desplegar una sustitución de proveedores, donde la Argentina podría encontrar oportunidades para posicionarse en ese mercado”, mientras que la idea de desechar las políticas de Biden a favor de las energías renovables, sería una “oportunidad en la Argentina para avanzar con proyectos de energía convencional y renovables”.
En el caso de Harris, Wise afirmó que el aumento de impuestos a los ricos y grandes empresas generaría un “beneficio de la renta fija en los EE.UU.”, que a su vez derivaría en una “merma de ingresos para activos argentinos”. Por otra parte, esperan que la promesa de créditos fiscales por el nacimiento de cada hijo lleve a un “poder adquisitivo mayor que podría incentivar el consumo de importados”.
Respecto a la expansión de los programas de salud y el abaratamiento de medicamentos, suponen una “búsqueda de rentabilidad perdida de laboratorios en mercados locales”. Por último, la expansión del gasto público y control sobre el precio de los alimentos produciría más inflación, lo que “obliga a la FED a una política monetaria más restrictiva que a su vez conduce a encarecer el endeudamiento de los demás países, y a restringir los capitales disponibles en el mundo”.