El BCE teme un "efecto contagio" por la deuda de Italia
El elevado nivel de deuda italiano, cercano al 130% de su PBI, preocupa por la conexión con las entidades bancarias, señaló el vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos.
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, advirtió que la conexión entre los bancos y la deuda soberana de los países volvió a ser un tema de preocupación en Europa, sobre todo el caso italiano, de acuerdo con una publicación de la agencia EFE.
"Se ven resurgir en Europa preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda, tanto en el sector público como en el privado" indicó de Guindos en un discurso pronunciado en Fráncfort.
El funcionario señaló que Italia tiene un elevado nivel de deuda (130% de su Producto Bruto Interno) y ese hecho ha creado tensiones políticas por los planes presupuestarios del Gobierno Italiano, objetados semanas atrás por Bruselas.
"Las fuertes reacciones del mercado a los acontecimientos políticos han creado nuevas preocupaciones sobre la conexión entre los bancos y la deuda soberana en partes de Europa", según de Guindos. "Aunque el contagio hasta ahora ha sido limitado, sigue siendo una posibilidad", advirtió el vicepresidente del BCE.
Por ello es necesaria, según de Guindos, "disciplina fiscal" en Europa, así como que se apliquen las normas fiscales.
De Guindos afirmó que los datos apuntan a un crecimiento económico los próximos dos años, pero advirtió que se están creando riesgos en el sistema financiero tanto en la zona del euro como a nivel global.
"La expansión actual de EE.UU. es ahora significativamente más prolongada que en términos históricos y la segunda más larga en la historia moderna", dijo de Guindos.
Una caída en el ciclo macrofinanciero estadounidense "podría desencadenar una revaloración de los activos de más riesgos", añadió.
De Guindos también habló de las tensiones en las economías de mercado emergentes por la fortaleza del euro y el aumento de las fricciones en el comercio.
Estos acontecimientos pueden frenar las perspectivas de crecimiento global, incrementar de forma abrupta las primas de riesgo y crear un efecto dominó y fuertes ventas, presionando más los precios y pudiendo contagiar a los mercados financieros de la zona del euro, consideró el funcionario.
El sector de fondos de inversión necesita "una gran atención desde el punto de la estabilidad financiera" porque ha triplicado sus activos en la última década, según de Guindos.