Estados Unidos y Colombia dieron por superado el conflicto bilateral surgido el fin de semana por la deportación de migrantes ilegales dispuesta por Washington, aunque los presidentes de ambos países continuaron el diferendo vía redes sociales.

A última hora del domingo, la Casa Blanca emitió un comunicado en el que afirmaba que Bogotá aceptó "todos los términos del presidente Trump", lo que incluye la autorización para llevar a cabo vuelos de deportación. "Con base en este acuerdo, los aranceles y las sanciones del IEEPA (Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional), completamente redactados, se mantendrán en reserva y no se firmarán, a menos que Colombia incumpla este acuerdo", expresa el documento, según RTenespañol.

El acuerdo abarca únicamente a los migrantes colombianos que se encuentran en suelo estadounidense de forma irregular. En este sentido, el gobierno de Gustavo Petro se comprometió a aceptar "sin limitaciones ni demoras" a sus connacionales que la Administración de Donald Trump decidió deportar.

Por su parte, Washington también acordó levantar las sanciones de visado impuestas por el Departamento de Estado, así como dejar sin efecto las inspecciones reforzadas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, pero condicionado a que aterrice en Colombia el primer avión con los indocumentados deportados y el procedimiento del retorno concluya con éxito.

"El presidente Trump seguirá protegiendo ferozmente la soberanía de nuestra nación y espera que todas las demás naciones del mundo cooperen plenamente, aceptando la deportación de sus ciudadanos presentes en Estados Unidos de manera ilegal", cierra el comunicado.

El diferendo se agravó debido a que en plena operación de deportaciones masivas de la Casa Blanca, Petro se negó a recibir los aviones militares estadounidenses que transportaban a migrantes colombianos esposados y con grilletes. "Un migrante no es un delincuente y debe ser tratado con la dignidad que un ser humano merece", escribió ayer en su cuenta de X el mandatario colombiano. 

En represalia, Trump anunció la puesta en marcha de una serie de sanciones para castigar a Colombia, lo que causó un fuerte rechazo y resentimiento entre varios países de la región. Pero Petro no se quedó atrás, y también comunicó la implantación de aranceles y sanciones en espejo de las dispuestas por Washington.

A posteriori, el gobierno de Colombia también dio por superado "el impase" con Washington y confirmó que seguirá recibiendo a los colombianos que "retornen en condición de deportados" de Estados Unidos.

"Seguiremos recibiendo a los colombianos y a las colombianas que retornen en condición de deportados, garantizándoles las condiciones dignas como ciudadanos sujetos de derechos", declaró a última hora de ayer el ministro de Asuntos Exteriores colombiano, Luis Gilberto Murillo.

El diplomático agregó que viajará junto con el embajador de Colombia en EE.UU., Daniel García-Peña, a la ciudad de Washington "en los próximos días para sostener reuniones de alto nivel que den seguimiento a los acuerdos, resultados del trabajo conjunto, que llevó al intercambio de notas diplomáticas entre los dos gobiernos".

El canciller subrayó que "el Gobierno de Colombia, bajo la directriz del presidente Gustavo Petro, tiene dispuesto el avión presidencial para facilitar el retorno de los connacionales que iban a llegar al país en las horas de la mañana en vuelos de deportación". Además, confirmó que "se mantendrán los canales diplomáticos de interlocución para garantizar los derechos, el interés nacional y la dignidad" de los ciudadanos colombianos.

A pesar de esto, Trump y Petro continuaron con su esgrima verbal a través de las redes sociales. El estadounidense publicó en Social Truth, su propia red social, un meme generado por IA con una imagen de él caracterizado como gangster y con las siglas FAFO. Este es un acrónimo de la frase estadounidense: “Fuck Around and Find Out”, que podemos traducir coloquialmente como “Sigue jodiendo y verás”.

Petro realizó un posteo en su cuenta de la red social X, en el que incluso habló de un posible golpe de Estado en su contra. "Puede con su fuerza económica y su soberbia intentar dar un golpe de estado como hicieron con (el expresidente chileno, Salvador) Allende. Pero yo muero en mi ley, resistí la tortura y lo resisto a usted. No quiero esclavistas al lado de Colombia, ya tuvimos muchos y nos liberamos. Lo que quiero al lado de Colombia, son amantes de la libertad. Si usted no puede acompañarme yo voy a otros lados", escribió el presidente colombiano.