Al menos nueve personas murieron y catorce resultaron heridas en un bombardeo israelí contra un edificio del centro de Beirut, en el segundo ataque contra la capital de Líbano desde el inicio del conflicto entre el grupo chiita Hezbolá e Israel. 

Según el Ministerio de Salud Pública del Líbano, los especialistas seguían trabajando "para completar las pruebas de ADN e identificar los restos que fueron retirados del lugar del ataque y, en consecuencia, tener claro el recuento final de las víctimas del ataque". El objetivo fue un edificio del Comité Islámico para la Salud, una organización vinculada a Hezbolá, ubicado en la céntrica zona de Al Bashura.

En tanto el ejército israelí confimó que continúa con sus ataques e incursiones sobre el sur de Líbano. Al respecto, a primera hora de la tarde las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ordenaron a los civiles evacuar unas 25 localidades, entre ellas Nabatiya, una urbe casi exclusivamente chiita situada a 70 kilómetros al sureste de Beirut. 

Asimismo, las FDI informaron la muerte de unos 60 combatientes de Hezbolá en una serie de ataques aéreos en Líbano, incluido uno contra un edificio municipal en la localidad de Bint Jbeil (sur) que según Israel estaba siendo utilizado para almacenar armas, y en el que murieron 15 milicianos.

El balance de muertos por el enfrentamiento entre la milicia chiita y los israelíes sigue subiendo y ya asciende a casi 2.000. Sólo ayer, 46 personas murieron y otras 85 resultaron heridas en los bombardeos lanzados por Israel contra el Líbano, según información del Ministerio de Salud Pública libanés.

Israel y Hezbolá llevan enfrentados desde el inicio de la guerra en la Franja de Gaza hace casi un año, pero la violencia aumentó desde hace dos semanas a un nivel sin precedentes desde 2006, cuando las fuerzas israelíes iniciaron una campaña de bombardeos masiva que arrasó localidades y pueblos enteros.