En lo que va del año, la Argentina experimentó una drástica transición económica, caracterizada sucesivamente por el proceso electoral de 2023, la asunción del nuevo gobierno y el inicio de una nueva política, que impuso una fuerte corrección de precios relativos, reformas regulatorias y de funcionamiento de la economía en general.

En ese contexto, la industria de la Economía del Conocimiento, en general, mantuvo el nivel de exportaciones y de empleo, valores que marcan la resiliencia del sector durante un período tan heterogéneo.

A junio de este año, las exportaciones totales alcanzaron los USD7.831 millones, lo que representa una disminución del 1,4% en comparación con el mismo período del año anterior. No obstante, en el segundo trimestre de 2024 se observó un importante incremento del 8,7%, marcando una recuperación tras la tendencia negativa de trimestres previos, indica el informe Argenconomics.

Nuevamente se destaca el crecimiento de los servicios profesionales que aumentaron 4,2%, alcanzando un share de 63,2% respecto del total. El sector informático, en cambio, tuvo una significativa caída interanual que alcanzó al 9%, siendo su participación de 29,5 por ciento. Las exportaciones de los otros rubros son poco relevantes, y su comportamiento interanual es muy errático. Los servicios personales, culturales y recreativos representan el 4,2% del total y su caída interanual fue de 18,9 por ciento. Los cargos por uso de propiedad intelectual solo representan el 3,1% del total y su baja fue del 2,8 por ciento.

A nivel global, las exportaciones de servicios basados en el conocimiento crecieron un 8,6% en 2023, según datos de la OMC. Sin embargo, Argentina redujo su participación en el mercado mundial al 0,23%, cayendo al puesto 43 del ranking, en contraste con el 0,37% de participación alcanzado en 2010. Este descenso refleja el impacto de años de inestabilidad macroeconómica en la competitividad del país.

"La Economía del Conocimiento es clave para el desarrollo de Argentina, por ello es crítico continuar avanzando con medidas tendientes a estabilizar la macroeconomía y reducir las asimetrías de costo de nuestro país, como condición necesaria para impulsar la competitividad global del sector", afirmó Luis Galeazzi, Director Ejecutivo de Argencon.

Inteligencia Artificial

Más allá de los datos estadísticos, el gobierno nacional recientemente anunció el objetivo de posicionar Argentina como uno de los principales hubs globales de inteligencia artificial -IA- del mundo. El alcance de este objetivo es muy amplio, ya que la cadena de valor de la IA abarca desde la gestión masiva de datos en poderosos procesadores de última generación, hasta al despliegue de una extensa red capilar de servicios informáticos en todos los sectores productivos.

En adición a ello, la agenda pública también tiene como prioridad la atracción de inversiones específicas en el segmento de servicios profesionales. El lanzamiento de Argentina Delivers, una iniciativa de articulación público-privada entre la Cancillería, el Ministerio de Economía y Argencon, abre un capítulo de esfuerzos comunes para la atracción de centros de servicio de firmas multinacionales para que operen en el país, impactando en una mayor base exportadora y empleadora de calidad.

Con el objetivo de atraer grandes inversiones tecnológicas el gobierno nacional está procurando crear un "paraguas" de condiciones de estabilidad fiscal y seguridad jurídica que permitan compensar la incertidumbre macroeconómica que caracteriza el perfil de riesgo de nuestro país.

Por ello, entre los argumentos que justifican la norma del RIGI, se expresa la necesidad del "adelantamiento temporal de las soluciones macroeconómicas de inversión sin las cuales determinados sectores no podrían desarrollarse con el dinamismo deseado"...para que "nuestro país asuma nuevamente la condición de proveedor mundial de bienes y servicios en condiciones de calidad y competencia y, a través de ello, contribuir a la prosperidad y el progreso de la Nación".