El gremio de Aceiteros desarrollará este miércoles un debate donde participarán sus delegados de todo el país con ejes en la reforma laboral que oficializa la ley Bases y la reinstalación de la quita salarial por Ganancias entre otros temas. Las horas previas a esa convocatoria, que tendrá lugar en la ciudad de San Lorenzo provincia de Santa Fe, llega con fuertes cuestionamientos a la CGT.

Ese núcleo sindical incluso vislumbra la posibilidad de un nuevo paro general y nacional más allá de la posición al respecto de la central de Azopardo.

El congreso de trabajadores será encabezado por el secretario general de la Federación Aceitera Daniel Yofra y el titular del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) Daniel Succi. A la hora de la evaluación del encuentro Yofra calificó al mismo como “histórico” por la coyuntura, y resaltó la labor cotidiana de los delegados de base “son los que están en contacto permanente con todos nuestros compañeros” para acotar “seguramente ellos van a reclamar que tomemos algunas medidas”.

Con relación a lo que la CGT definió como “una nueva etapa de diálogo formal” con el Gobierno luego del encuentro con el secretario de Trabajo Julio Cordero, el sindicalista aceitero manifestó que esa central obrera “no está hoy a la altura de las circunstancias. Nos preguntamos si no entiende o no sabe qué le pasa a los trabajadores”.

Al respecto consideró que teniendo en cuenta la recesión, licuación de salarios y avances contra los derechos laborales "más tarde o más temprano se dará un paro contra este gobierno sin la necesidad de que lo  decrete la CGT".

Más allá de las dos huelgas generales que ya desarrolló Azopardo desde diciembre y su buena relación con los sindicatos más combativos de Azopardo, entre ellos algunos nucleados en el Frente Sindical (Fresimona) que lidera el camionero Pablo Moyano o la Corriente Federal de los Trabajadores (CFT), Yofra sentenció que “el diálogo de la CGT  con el Gobierno no es el adecuado, si tenemos en cuenta la realidad de los trabajadores”.

Consultado sobre prioridades sindicales el sindicalista consideró que urge entender las necesidades de los trabajadores y trazó un paralelo con la década del 90. “La referencia está clara en la época del menemismo donde hubo organizaciones encabezadas por el MTA (Movimiento de Trabajadores Argentinos) que lideraron la lucha incluso en forma paralela a la CGT. Paraba el MTA y no paraba la CGT, ahora los que definían la lucha convocaban a muchos trabajadores que estaban pasando necesidades en ese momento”.

Para el referente de los Aceiteros la alternativa del diálogo con la Casa Rosada sólo es viable para el movimiento obrero si cuenta con pautas bien definidas para el desarrollo de esa dinámica, “y la instancia inmediata al diálogo cuando éste no prospera es un plan de lucha”. Desde ese prisma recordó que las conquistas salariales o de condiciones de labor de su gremio fueron logradas con estrategia sindicales “y la participación de nuestros compañeros porque se trata de definir acciones y que las mismas tengan el respaldo de los trabajadores".