La secretaría de Trabajo de la Nación se apresta a reglamentar la reforma laboral que incluyó la ley Bases. La normativa abarca desde la extensión del período de prueba que deberá transitar un trabajador o trabajadora hasta la normativa donde se habilitará el despido por reclamos gremiales. Como secreto a voces tanto en ámbitos sindicales como entre los abogados laboralistas se remarca que la labor posee como motor a la secretaría laboral del ministerio de Capital Humano, a cargo de Julio Cordero, pero que el texto tendrá la última edición  del titular de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger.

La dinámica de acelerar las modificaciones como prioridad ya fue marcada por el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el citado Cordero. Según pudo saber este diario para la semana en curso las definiciones son prioridad para publicarlas en el Boletín Oficial. Entre sus tópicos también se destaca la creación de un fondo de cese laboral, similar al de la Uocra y que fue el eje de una charla entre el presidente Javier Milei y el titular del gremio de la construcción Gerardo Martínez. El Gobierno destaca a dicho fondo como “herramienta para generar empleo”. Mientras tanto hasta en los sectores más propensos al diálogo de la CGT la figura de Sturzenegger no sólo implica la pérdida de derechos laborales, que denunciaron en el Consejo del Salario (CNS), sino un cerrojo para cualquier alternativa de conversaciones.

Para algunos sindicalistas de Azopardo incluso el ex ministro personifica una de las razones “más potentes” para que la CGT no aceptara la convocatoria de la Casa Rosada de ser parte de la mesa de diálogo social junto a empresarios, funcionarios, legisladores y las provincias.

Dentro de las modificaciones que en forma directa o indirecta remite la figura de Sturzenegger en las últimas horas la Asociación Bancaria (AB) volvió a pronunciarse contra las políticas de ajuste y restricción de derechos laborales poniendo como caso testigo al Banco Nación (BNA), donde incluso mencionó al ministro de Desregulación y Transformación del Estado. En efecto, a la hora de referirse a esa entidad crediticia la AB manifestó que por un lado las autoridades del Nación han decidido aplicar un “regimen prejubilatorio” bajo la figura de “desvinculación por mutuo acuerdo” que busca certificar la posibilidad del retiro de trabajadoras a los 58 años y respecto a los hombres desde los 63.

La AB que lidera Sergio Palazzo alertó sobre “el objetivo de desmantelar al Banco Nación” al que definieron como “la principal herramienta financiera del país” y al mismo tiempo consideraron que las políticas de ajuste a cargo de los libertarios incluyen contradicciones.

Dentro de esa tesitura resaltaron que el esquema de desvinculación por acuerdo mutuo “es un sinsentido del directorio del BNA, si tenemos en cuenta que el ministro Federico Sturzenegger estaría incentivando una modificación en el régimen jubilatorio tanto para las mujeres a los 65 años, como para los hombres a los 68”. Sostienen allí que el objetivo gubernamental en concreto es la privatización del BNA.