El Gobierno de Javier Milei comenzó a transitar los primeros días difíciles de su gestión y se avecina un panorama complicado de reclamos sociales y rechazos políticos luego del anuncio del decreto de necesidad y urgencia que derogó más de 300 leyes.

El mismo día que realizó la cadena nacional del megadecreto, el Presidente enfrentó la primera gran manifestación en las calles de los movimientos piqueteros en rechazo a las medidas económicas. Se puso a prueba el protocolo antipiquete de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con un resultado desigual. 

Por un lado, Milei se expuso a monitorear los operativos de seguridad mientras miles de manifestantes cortaban las calles rumbo a la Plaza de Mayo, sin graves incidentes. Un escenario que pareció adaptarse más a los objetivos de los líderes sociales. Sin embargo, el Gobierno festejó la puesta en marcha del protocolo "de orden público".

Las calles de la Ciudad de Buenos Aires volvieron a agitarse a los pocos minutos que terminó el anuncio de Milei por cadena nacional. Los cacerolazos sonaron desde los balcones, otra vez, un 20 de diciembre pero de 2023.  

Las protestas y movilizaciones seguirán en los próximos días contra las medidas del gobierno actual, a tan sólo 11 días de haber asumido. La administración libertaria minimiza las protestas. "Son días difíciles que ya van a pasar", reconocen en un despacho de Balcarce 50.

Tanto Milei, el asesor presidencial, Federico Sturzenegger, y el vocero presidencial, Manuel Adorni, se burlaron de los cacerolazos. "No sé cómo leyeron tan rápido el DNU y salieron a protestar", ironizaron los funcionarios. Pese a las protestas, el Presidente prometió que "habrá más medidas". Como dijo esta mañana el ministro del Interior, Guillermo Francos, Milei "se siente empoderado"  y "con la legitimidad del 56 por ciento de los argentinos".

Ahora la pelea principal será en el Congreso Nacional, donde se acumularon los rechazos de distintas fuerzas políticas al decreto. El DNU tiene más probabilidades de ser rechazado que aprobado, pero para eso aún faltan varias semanas. El Poder Ejecutivo aún no llamó a sesiones extraordinarias. Una gran cantidad de constitucionalistas cuestionaron el decreto de desregulación de la economía por "no cumplir con los requisitos" de la Constitución por lo que se avecinan un batallón de medidas judiciales.

Los gremios también tendrán su protagonismo. La CGT decidió realizar el próximo miércoles 27 una gran concentración frente a los Tribunales de Plaza Lavalle. Hoy siguen las protestas de organizaciones sociales y gremiales frente al Obelisco.