El mismo dia en que se aprobaron los proyectos de ATN e impuesto sobre los combustibles, el Senado convirtió en ley un incremento del 7,2% para las jubilaciones y una mejora del bono para los haberes mínimos. Estas normas tienen un punto cuestionado por los sectores productivos, ya que para financiar el sistema previsional elimina exenciones en los aportantes a las sociedades de garantía recíproca (SGR).

 En ese marco, diversas cámaras empresarias, industriales e instituciones del sistema financiero argentino expresaron su profunda preocupación y respaldo unánime a las SGR tras la aprobación del Artículo 10 del proyecto de Ley de Jubilaciones y Pensiones en la Cámara de Diputados. Esta modificación normativa es vista como una seria amenaza al sistema de garantías para pymes, con consecuencias directas sobre el acceso al crédito, el empleo y el entramado productivo nacional.

La Cámara Argentina de Sociedades y Fondos de Garantía (Casfog), que agrupa a todas las SGR del país, manifestó su "máxima preocupación" y advirtió que el artículo en cuestión implica una "desarticulación del sistema de sociedades de garantía recíproca", lo que podría dejar "sin acceso al crédito a miles de pymes y emprendedores".

Según señaló Pablo Pereyra, vicepresidente de Casfog, la medida podría provocar una caída en la cadena de pagos y un derrumbe de la actividad económica. Esta advertencia es compartida por más de veinticuatro entidades de primer nivel, que representan 3.700 cámaras empresariales y cerca de 650.000 empresarios pymes de todos los sectores.

El sistema de SGR fue identificado como un puente clave entre las pymes y el financiamiento, por lo que su potencial eliminación afectaría una de las pocas herramientas efectivas, inclusivas y federales para el financiamiento de este sector.

Datos clave del impacto de las SGR en la economía argentina

• El sistema de SGR sostiene una parte sustancial del financiamiento pyme en Argentina:
• Más de 100.000 micro, pequeñas y medianas empresas acceden al crédito gracias al aval de una SGR.
• Uno de cada tres préstamos pymes en el sistema financiero cuenta con aval de SGR.
• El 35% del stock de préstamos bancarios al sector pyme está garantizado por estas sociedades.
• El volumen garantizado supera los $3,8 billones (unos USD3.400 millones), lo que representa el 0,5% del PBI argentino.
• El 40% de los cheques de pago diferido avalados en el mercado de capitales depende del sistema.
•  El 70% de los certificados de garantía emitidos se dirige a micro y pequeñas empresas.
• Las pymes beneficiadas generan más de 510.000 empleos directos y exportan por USD1.500 millones anuales.

Uno de los principales argumentos a favor del recorte es el presunto costo fiscal del sistema. Sin embargo, Casforg y otras entidades señalan que el régimen no genera gasto para el Estado y es netamente superavitario. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el costo fiscal de las SGR representa apenas el 0,027% del PBI.

Respaldo amplio y transversal

El apoyo institucional es generaliazado, ya que acompañan el reclamo las principales organizaciones financieras del país, entre ellas, Mercados de negociación: MAV, BYMA y A3; Bolsas de comercio: seis en total, distribuidas en distintas provincias y Asociaciones bancarias: ABA, ADEBA y ABE (representan a treinta bancos públicos y privados).

Advertencias desde el sector industrial y comercial

La Unión Industrial Argentina (UIA) remarcó que, si se reduce el incentivo a los socios protectores, por cada peso que se retire del sistema habrá menos  aval para las pymes.  

Y la Unión Industrial de la provincia de Buenos Aires (UIPBA) agregó que "la eliminación de las exenciones impositivas que incentivan los aportes de los socios protectores a las Sociedades de Garantía Recíproca (SGR), inevitablemente, va a impactar negativamente en uno de los pocos instrumentos que fomentan el financiamiento productivo, siendo perjudicial especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas, motor esencial de la economía nacional".

En tanto, CAME advirtió que se está perjudicando uno de los instrumentos "más eficientes y federales" del financiamiento productivo. Por su parte, Fecoba subrayó que sostener el régimen de SGR es fundamental para el desarrollo económico y el trabajo argentino.