Tras fracasar ayer el primer intento de juicio político contra el presidente de Corea del Sur, Yoon Seok-yeol, el líder del oficialista Partido del Poder del Pueblo (PPP), Han Dong-hoon, aseguró que impulsarán una “salida temprana y ordenada del presidente” para estabilizar la situación política en el país, convulsionada por la fallida declaración de la ley marcial la semana pasada.
En un claro retiro de apoyo expresado en un comunicado conjunto con el primer ministro, Han Duck-soo, emitido en la sede del PPP, en el oeste de Seúl, Han subrayó que la mayoría del pueblo cree que Yoon debe dimitir, dado que no es capaz de gobernar normalmente por el resto de su mandato, informó la agencia oficial Yonhap.

Por su parte, el ministro de Economía y Finanzas, Choi Sang-mok, prometió tomar medidas audaces y rápidas, si fuera necesario, contra cualquier volatilidad excesiva en los mercados financieros y de divisas, en medio de la crisis política.
El Gobierno y el Banco de Corea (BOK, según sus siglas en inglés) aseguraron estar tomando medidas preventivas para responder a las volatilidades del mercado, y prometen desempeñar un papel clave, como torre de control económico, para gestionar la situación de manera estable.

En tanto, el opositor Partido Demócrata anticipó que está decidido a "interrumpir semana tras semana" las sesiones en la Asamblea Nacional y seguir adelante con la moción de destitución. 
Park Chan-dae, líder de la mayoría parlamentaria, en manos de los demócratas, anunció: "Una vez que comience la sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional el día 11, se propondrá inmediatamente, se aprobará por el Comité parlamentario de Legislación y Judicial y se presentará a la sesión plenaria, tomará de 3 a 4 días, si se hace muy rápido".
Por su parte, el diputado Lee Jae-myung, líder del mismo partido, confirmó que la presión continuará "hasta que suceda" la dimisión, y prometió que el país volverá "definitivamente a la normalidad" para las vacaciones de Navidad y de Año Nuevo.

Yoon logró evitar el primer intento de destitución en el Parlamento debido a la falta de quórum, puesto que casi todos los miembros del oficialista Partido Popular habían abandonado la sala de sesiones antes de la votación. No obstante, el líder del oficialismo, Han Dong-hoon, dijo que el partido ha decidido que Yoon debería dimitir. "La declaración de ley marcial fue una clara y grave infracción de la ley", admitió.
El Partido Popular ocupa 108 escaños en la Asamblea Nacional y la oposición necesita al menos ocho votos de esta minoría para destituir al presidente.