El operador ferroviario alemán Deutsche Bahn planea recortar 30.000 puestos de trabajo, o alrededor del 9% de su personal, después de que enormes inversiones para reparar su red ferroviaria, huelgas y el mal tiempo provocaron una pérdida neta de 1.000 millones de euros en el primer semestre.

Los recortes se realizarán en los próximos cinco años y afectarán principalmente a puestos administrativos, dijo el director financiero Levin Holle, añadiendo que este año habría que eliminar alrededor de 1.500 puestos de trabajo.

La compañía había rebajado ligeramente antes sus previsiones de beneficios operativos e ingresos para todo el año y ahora espera unas ganancias ajustadas antes de intereses e impuestos (EBIDTA) de alrededor de 1.000 millones de euros (1.080 millones de dólares) para 2024.

En marzo, la previsión era de más de 1.000 millones de euros, pero ahora se estima que los ingresos se situarán en torno al nivel del año pasado, de 45.000 millones de euros, 2.000 millones menos de lo previsto anteriormente.

Después de más de una década de subinversión, Deutsche Bahn inició enormes obras de reparación en sus vías, cruces y catenarias que durarán años y que ya están causando importantes retrasos y cancelaciones de trenes.

La introducción por parte del Gobierno alemán el año pasado del llamado billete alemán, que permite viajar en todos los trenes regionales y locales por 49 euros al mes, provocó un enorme aumento de pasajeros y agravó los problemas.

El operador ferroviario tiene una deuda de 33.000 millones de euros, pero la empresa espera recibir miles de millones de euros en reembolsos del gobierno federal en el marco de un nuevo programa de apoyo estatal para pagos anticipados por la renovación de la ruta.