Bicameral de Inteligencia: PRO y LLA compiten por la presidencia y Lousteau se mete en la puja
La comisión se constituirá este martes. Unión por la Patria tiene 6 de los 14 integrantes, por lo que será clave su postura al momento de elegir el nombre de quién quedará al frente.
La pregunta que todos se hacen por estas horas en el oficialismo y la oposición es la misma: quién quedará al frente de la Bicameral de Inteligencia, que se conformará este martes. En la disputa que se desató entre PRO, aliado a Victoria Villarruel y Patricia Bullrich; y La Libertad Avanza (LLA), de la mano de Santiago Caputo; Unión por la Patria (UP) prefiere mantenerse al margen, aunque sabe que tiene en sus manos la posibilidad de inclinar la balanza para un lado o para el otro. Cuenta con el mayor número de legisladores en esa comisión, 6 del total de los 14 que la integran, lo que no es poca cosa. Por fuera de esa puja, no descarta acordar con el senador radical Martín Lousteau para que sea él quien resulte electo como presidente.
El radicalismo presionó los últimos días al oficialismo para que se constituya la Bicameral que la Casa Rosada busca eludir ante el temor de que el resultado no sea el esperado. Desde el bloque de diputados de la UCR, que conduce Rodrigo De Loredo, le dejaron en claro al titular de la Cámara baja, Martín Menem, que necesitan esa comisión para contener allí el debate sobre el DNU que aumenta los recursos a la SIDE para fondos reservados y tener así un argumento para rechazar la sesión que impulsa pare este miércoles el sector de los radicales que se referencia en Facundo Manes, junto a Encuentro Federal y la Coalición Cívica.
Aunque le pusieron fecha a la reunión, los libertarios todavía no lograron sortear las internas sobre quién será el que conduzca la Bicameral. El nombre del legislador que ocupe esa silla será clave para juntar o no los votos que pongan en jaque al Gobierno por el decreto que reestructuró el organismo de Inteligencia y el que le otorgó 100 mil millones de pesos para un destino incierto.
La comisión justamente tiene como función supervisar y controlar el funcionamiento de la SIDE, así como también los gastos reservados con los que cuenta. Esa será la tarea de los diputados Germán Martínez, Leopoldo Moreau y Paula Penacca (UP), María Coletta (UCR), Gabriel Bornoroni y César Treffinger (LLA), Cristian Ritondo (PRO); y los senadores Oscar Parrilli, Eduardo De Pedro y Florencia López (UP); Lousteau, Martín Göerling (PRO), del Pro, Edgardo Kueider (Unidad Federal) y la radical Edith Terenzi, que responde al gobernador chubutense de PRO, Ignacio Torres.
Caputo insiste en que Kueider sea el que esté a cargo de la comisión, pero no cuenta hasta ahora con el apoyo suficiente, ni de la oposición autodenominada "dialoguista" ni de Unión por la Patria, que todavía le factura al entrerriano el apoyo a la Ley Ómnibus.
El margen de maniobra del oficialismo es acotado. Necesita del PRO y la UCR para imponer el nombre del presidente. En Balcarce 50 no dan por perdida esa posibilidad.
En PRO pelean para que se respete el acuerdo al que habían llegado con Villarruel para que ese lugar lo ocupe Goerling, que ahora además cuenta con el apoyo de Bullrich. En el peronismo tampoco están convencidos de que acompañar su postulación.
En Unión por la Patria observan de manera minuciosa los movimientos del oficialismo, a la espera de cómo se resuelva la interna libertaria sobre este tema. Sin ánimo para apoyar a los candidatos de PRO y de La Libertad Avanza, no descartan intervenir para que Lousteau termine al frente de la Bicameral. Con su apoyo, el titular de la UCR tiene el lugar asegurado.
Lousteau mantiene diálogo con el Ejecutivo nacional, sin embargo en el radicalismo niegan que se estén llevando adelante conversaciones para intentar cerrar un acuerdo en torno a la Bicameral. Aún así, a nadie le pasó desapercibido que en la última sesión en Diputados los legisladores que responden al economista impidieron que al día siguiente se tratara el DNU sobre la SIDE.